Escritura básica del guion

INT. CASTILLO DE DRÁCULA. NOCHE. Nuestro héroe, RICHTER 
Belmont, desafía valientemente a DRÁCULA quien lo espera 
sentado en su trono. Se ve cansado, ojeroso y sin ilusiones. 
DRÁCULA bebe de una copa que contiene algún misterioso líquido
rojo y espeso. Hay cuatro candelabros encendidos que esconden
jugosos objetos de regeneración y poder que serán muy útiles 
para la pelea que se avecina. 
DRÁCULA

¿Qué es un hombre? 
(arroja la copa enfurecido)
No más que un miserable montón de secretos, 
pero suficiente charla.
¡En guardia!
INICIA PELEA FINAL. 

Escribir un guion para televisión, cinema o radio puede ser una tarea complicada, sobre todo porque la industria del entretenimiento versa sobre medios relativamente jóvenes que continuamente se adaptan para servir a su audiencia. A la fecha, aún se están incorporando distintas narrativas a otra industria que exige historias cada vez más complejas: los videojuegos. El aumento en la demanda sobre contenido interactivo, que suele contener distintos desarrollos y finales, así como una combinación de géneros para buscar métodos novedosos para contar historias (podcasts animados, por ejemplo) empuja nuevamente a que los guiones adapten sus estructuras para incorporar la complejidad de estos elementos. 

Sin embargo, aún cuando los espectadores cada vez son más sofisticados o los medios pueden ser más rimbombantes, no hay que olvidar que el guion es una estructura básica, un documento muy sencillo cuyo objetivo es guiar a una ciudad de artistas a producir un solo contenido. La tarea del guionista es reducir una historia a una forma básica, sencilla de leer, para dar pie a que los directores, camarógrafos, actores, actores de doblaje, diseñadores de arte o programadores pueden crear, adaptarse, improvisar y seguir instrucciones para construir o generar un mundo de ficción. 

Como base, usaremos el libro de escritura de guiones de J. Michael Straczynski (The Complete Book of Scriptwriting), afamado escritor de series de televisión policiacas, de ciencia ficción y animadas. Una de sus sugerencias básicas es: no es necesario que el guionista se ponga muy técnico, pero dé espacio a los directores y fotógrafos para que trabajen en su territorio. Sin embargo, el guionista debe contar historias que le importan para que pueda llevarlas a término. Siempre hay que incluir una parte de nosotros (un tema que nos apasione, o nos provoque) para que el guion nos lleve por un camino interesante y no dejemos de sentir el deseo de contarlo. 

Propósito

  • Estudiar las bases de un guion cinematográfico, televisivo y radiofónico.  
  • Explorar cómo podemos adaptar estas estructuras para otros medios que son más nuevos, como el cómic y los videojuegos. 
  • Aprender algunos terminajos técnicos que nos serán muy útiles si alguna vez somos parte del equipo que escribe LUIS MIGUEL: LA SERIE. 
  • Aprender un método para contar una historia que puede sernos útil en un futuro. Uno nunca sabe: quizás Odiseo, cuando engañó a Polifemo, en realidad estaba escribiendo un guion.

Temario

  1. Cinema y televisión. 
  2. Animación. 
  3. Radio. 
  4. Teatro / libreto dramático. 

Nota: la complejidad del tema se desarrollará también a lo largo de nuestras clases prácticas de guionismo. Cualquier duda sobre los aspectos técnicos del mismo, así como desarrollar estrategias para la escritura de guiones que se adapten a nuestros medios e historias, será resuelta durante estas clases hasta que la maqueta final esté terminada.